La reforma laboral va a ir adelante. Los que no están de acuerdo con ella no son precisamente los que han votado a los que la han puesto en marcha. ¿En base a que van a dar pasos atrás? Mañana todo surgirá igual, los obedientes trabajadores, esclavos de unos gastos impuestos por el mercado, ocuparán sus puestos de trabajo; lo que hoy no hemos comprado, lo compraremos mañana y la rueda seguirá girando.
Los empresarios no hacen huelga. Los trabajadores que no han ido a trabajar pierden gran parte de su sueldo. Parte que no pagarán los empresarios. Trabajo acumulado que los señores sagrados de la economía se encargarán de repartir en los próximos tres días.
Hay mucha gente que dice que no es momento para huelgas, yo les pregunto ¿Cuál es el puto momento? Se puede decir que no se cree en las huelgas como herramienta de cambio, por ejemplo, ya que los gobiernos y partidos se limitan a dar comunicados de prensa. El PSOE muestra su solidaridad con los trabajadores, obviamente ellos no lo son. La base de cualquier país son los obreros, ¿cómo no hay un partido con capacidad de gobernar que nos represente? La izquierda debe resurgir, sí. Pero mientras tanto es lo que toca, huelga, movilización, acción y concienciación.
Estamos gobernados por gente que ha vivido entre pasta, que hace leyes para los que se levantan a las 7 de la mañana y cogen autobuses hasta los topes. Tecnocratas los llaman. Es despotismo ilustrado. Estoy casi seguro de que no lo hacen para que nos jodamos, pero no nos gusta su sistema, por lo menos a mi. Nos dejamos comprar por ipods, ipads, iphones, idioteces, imbecilidades y vacaciones en Torrevieja, el capitalismo es cómodo mientras estás en la cresta de la ola, estamos encantados. Las vacas flacas siempre llegan y se quedan sin leche los de siempre. Pero nos sigue gustando pensar que no nos va a tocar.
Seguro que no se echan atrás, seguro que no se lo piensan dos veces en la próxima reforma. Pero si hoy ha salido el 60%, en la próxima saldrá el 80% y la siguiente el 100%. Entonces puede que mejoremos las condiciones laborales, aunque solo servirá para que nos las puedan quitar en un futuro no tan lejano.
Lo dicho, mientras tanto… huelga. Mañana sol y playa.
Los empresarios no hacen huelga. Los trabajadores que no han ido a trabajar pierden gran parte de su sueldo. Parte que no pagarán los empresarios. Trabajo acumulado que los señores sagrados de la economía se encargarán de repartir en los próximos tres días.
Hay mucha gente que dice que no es momento para huelgas, yo les pregunto ¿Cuál es el puto momento? Se puede decir que no se cree en las huelgas como herramienta de cambio, por ejemplo, ya que los gobiernos y partidos se limitan a dar comunicados de prensa. El PSOE muestra su solidaridad con los trabajadores, obviamente ellos no lo son. La base de cualquier país son los obreros, ¿cómo no hay un partido con capacidad de gobernar que nos represente? La izquierda debe resurgir, sí. Pero mientras tanto es lo que toca, huelga, movilización, acción y concienciación.
Estamos gobernados por gente que ha vivido entre pasta, que hace leyes para los que se levantan a las 7 de la mañana y cogen autobuses hasta los topes. Tecnocratas los llaman. Es despotismo ilustrado. Estoy casi seguro de que no lo hacen para que nos jodamos, pero no nos gusta su sistema, por lo menos a mi. Nos dejamos comprar por ipods, ipads, iphones, idioteces, imbecilidades y vacaciones en Torrevieja, el capitalismo es cómodo mientras estás en la cresta de la ola, estamos encantados. Las vacas flacas siempre llegan y se quedan sin leche los de siempre. Pero nos sigue gustando pensar que no nos va a tocar.
Seguro que no se echan atrás, seguro que no se lo piensan dos veces en la próxima reforma. Pero si hoy ha salido el 60%, en la próxima saldrá el 80% y la siguiente el 100%. Entonces puede que mejoremos las condiciones laborales, aunque solo servirá para que nos las puedan quitar en un futuro no tan lejano.
Lo dicho, mientras tanto… huelga. Mañana sol y playa.